“Con profunda tristeza y dolor en nuestros corazones, despedimos hoy a María Jiménez, mujer amada y respetada por su compromiso inquebrantable con su familia, amigos, y admiradores. Un espíritu indomable, una personalidad arrolladora, una mujer fuerte y valiente que luchó contra todas las adversidades más allá de lo imaginable”, son las palabras de su hijo, Alejandro Jiménez, encargado de hacer pública la triste noticia a través de en comunicado enviado a Europa Press.
La actriz española ha fallecido a la edad de 73 años, en su casa de Triana (Sevilla), a las 01:00 de la madruga de este jueves de agosto, aunque la noticia se hizo pública varias horas más tarde.
Rodeada de sus seres queridos, el texto emitido por la prensa continúa así: “Dedicó su vida a sus dos hijos, Rocío (también fallecida) y Alejandro, sus pasiones, sus amigos, a los que cultivó y amó con gran generosidad hasta el final de sus días, a su hermana Isabel, a la que adoraba, y siendo bandera de libertad”, y es que su hay un rasgo que destacarle a la actriz y cantante es su raza, su fuerza y su poderío para enfrentarse a las adversidades.
Jiménez cantó al despecho como pocas artistas han sabido hacerlo, prueba de ello nos queda su canción más conocida, Se acabó, grabada en 1978 y convertida en hit desde entonces. Pero más allá de su labor en la música, avalada por más de 50 años de recorrido (su último disco lo presentó en el año 2020), la cantante de flamenco dedicó gran parte de su vida ha cultivar un legado que hoy le sobrevive. Así reza el comunicado enviado por su hijo: «trabajó incansablemente para dejar una impronta contra la violencia de género que defendía día a día». Trabajo en le que se involucró tras ser víctimas de malos tratos. Tanto es así que hace sólo unos meses presentó en Sevilla su fundación, dedicada a servir ayuda a las mujeres víctimas de violencia de género y a promover la integración social del colectivo LGTBI+.
Con una salud delicada y tras una operación por obstrucción intestinal que tuvo a Jiménez dos meses en el hospital, hace unos años, hoy se apaga su voz, pero no su recuerdo. Como bien señala su hijo, «se nos va la última gran diva, y una nueva estrella pasa a formar parte del firmamento, con un brillo intenso. Sin lugar a dudas será profundamente extrañada, la echaremos mucho de menos, su familia, amigos y admiradores, pero su legado vivirá para siempre».
A diferencia de su single más sonado, la garra de Jiménez nunca acabará. Siempre recordaremos esos más de 18 álbumes publicados, sus actuaciones en películas y series de televisiones, y los reconocimientos recibidos, como la Medalla de Oro al Mérito de las Bellas Artes, en 2022, otorgada por el Ministerio de cultura. También la Medalla de la Ciudad de Sevilla, la Insignia de Oro de Chiclana, el Premio Andalucía Excelente o la distinción en los Premios Radiolé.